El increíble castillo vagabundo

(Hauru no ugoku shiro)

Año: 2005

Nacionalidad: Japón

Dirección: Hayao Miyazaki

Guión: Hayao Miyazaki, basado en la novela de Diana Wynne Jones

Intérpretes: Chieko Baisho, Takuya Kimura, Akihiro Miwa, Tatsuya Gashuin, Ryunosuke Kamiki

Formato: DVD

Sinopsis: La pequeña Sophie trabaja día a día haciendo sombreros en la tienda que le heredó su padre al morir. En un paseo, Sophie conoce a un hechicero llamado Howl, muy elegante y tremendamente atractivo. Pero una malvada bruja, en un ataque de celos, hace caer una maldición sobre Sophie, transformándola en una viejecilla de 90 años. Desesperada, Sophie abandona su casa y vaga triste sin rumbo fijo, cuando de repente se encuentra con el Increíble Castillo Vagabundo de Howl, el hechicero. Escondiendo su verdadera identidad entra al castillo como ama de llaves.

Recomendación: ¿Cómo no caer rendido ante una nueva película de Miyazaki? Cada una de ellas está repleta de ideas y sorpresas visuales, como el mismo castillo del título y su mágico concepto del espacio.

Sin embargo, El increíble castillo vagabundo tiene muchísimo más para ofrecer que el espectáculo visual esperable de este director. El manejo de los tiempos y de los silencios, en las conversaciones más triviales, vuelven única cada escena. Las interrelaciones entre los personajes se vuelven peculiarmente extrañas, cuando empezamos a percibir que detrás de todo personaje enemigo se encuentra un posible aliado, o que quizás el término “enemigo” es simplemente un error humano de parte del espectador, acostumbrado a la confrontación.

Una última acotación: desde tiempos remotos, la narración destinada a los niños ha incluido un romance entre el protagonista y la princesa o heroína de turno. Esto fue tomado luego por la factoría Disney y potenciado hasta convertirse en marca indeleble: toda película infantil debe tener su correspondiente historia cursi de amor. El Dr. Caligari niega rotundamente este mandamiento, pues el interés romántico no es cosa de niños realmente, ni forma parte de sus intereses.

Sin embargo, si decidimos de todas maneras mostrarles eso, que sea en una historia como esta, donde el amor es mostrado con sus problemas reales, y no con conceptos de decadente romanticismo.

La película de Miyazaki es una historia de amor, donde los obstáculos, como en la vida real, no provienen de la interferencia de villanos, sino de las dudas, secretos y problemas de autoestima de sus protagonistas. Y donde se nos dice que sólo la sinceridad y la entrega real de lo mejor que tenemos puede acercarnos al otro. Por que eso es el amor, y no andar matando dragones por ahí.